21 ¡Ay de los que se creen sabios y se consideran inteligentes!
22 ¡Pobres de los que son valientes para beber vino, y campeones para mezclar bebidas fuertes,
23 pero que perdonan al culpable por dinero, y privan al justo de sus derechos!
Esta es mi forma de predicar y enseñar la palabra de Dios a todo aquel que quiera oir. Segundo mensaje en Garabaldal.