En la biblia existe un versiculo en el cual dice que Dios no pide nada imposible Deuteronomio 30:6 a 20
06 Yavé, tu Dios, circuncidará tu corazón y el corazón de tus descendientes para que ames a Yavé con todo tu corazón y con toda tu alma y para que vivas. 07 Entonces Yavé, tu Dios, hará caer todas estas maldiciones sobre tus enemigos, contra los que te hayan perseguido porque te odian.
08 Tú volverás a escuchar a Yavé y pondrás en práctica todos sus mandamientos, que yo te prescribo hoy.
09 Yavé, tu Dios, te dará abundante prosperidad en todo lo que hagas, multiplicará a tus hijos y las crías de tus ganados; tu tierra será fecunda y tendrás de todo en abundancia. De nuevo se complacerá Yavé en tratarte bien, como hizo con tus padres,
10 porque tú habrás vuelto a Yavé, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma, y guardarás sus mandamientos y sus normas, en una palabra, lo que está escrito en el libro de esta Ley.
11 Este mandamiento que yo te doy no es superior a tus fuerzas ni está fuera de tu alcance.
12 No está en el cielo, para que puedas decir: ?¿Quién subirá al cielo y nos lo traerá? Entonces escucharemos y lo pondremos en práctica.?
13 Tampoco está al otro lado del mar, para que tengas que decir: ?¿Quién pasará hasta el otro lado y nos lo traerá? Entonces escucharemos y lo pondremos en práctica.?
14 Todo lo contrario, mi palabra ha llegado bien cerca de ti; ya la tienes en la boca y la sabes de memoria, y sólo hace falta ponerla en práctica.
15 Mira que te he ofrecido en este día el bien y la vida, por una parte, y por la otra, el mal y la muerte. Lo que hoy te mando es que tú ames a Yavé, tu Dios, y sigas sus caminos.
16 Observa sus preceptos, sus normas y sus mandamientos, y vivirás y te multiplicarás, y Yavé te dará su bendición en la tierra que vas a poseer.
17 Pero, si tu corazón se desvía y no escuchas, sino que te dejas arrastrar y te postras ante otros dioses para servirlos,
18 yo declaro hoy que perecerás sin remedio. No durarás largo tiempo en el país que vas a ocupar al otro lado del Jordán.
19 Que los cielos y la tierra escuchen y recuerden lo que acabo de decir; te puse delante la vida o la muerte, la bendición o la maldición. Escoge, pues, la vida para que vivas tú y tu descendencia.
20 Ama a Yavé, escucha su voz, uniéndote a él, para que vivas y se prolonguen tus días, mientras habites en la tierra que Yavé juró dar a tus padres, Abrahán, Isaac y Jacob.»